
¿Realmente tenemos que morir?
Quiero decir: ¿realmente?
¿Y no es posible morir entre horas,
un poco después de las comidas,
otro poco tras las cenas, durante todo un desayuno?
¿Obligatoriamente nos morimos
o le echamos voluntad y cigarrillos,
botellas y marihuana?
Yo es que no aclaro con las luces.
Quiero decir: tantas.
Quiero decir: realmente.
¿Y si voy y no me muero qué me pasa:
me desmuero, me desvivo,
vivo y pago facturas inauditas,
camino tantos pasos que me pierdo,
amo tanto que me inquieto,
duermo tanto que me desatornillo?
Quiero decir: un entierro.
Quiero decir: realmente.
Quiero decir: un entierro por ejemplo.
¿Por qué sólo hay un muerto en cada entierro?
¿Por qué sólo una fosa y no dos maniquíes?
¿Por qué tantos amigos y ni lloran?
O si lloran ¿por qué no agitan un sombrero?
Quiero decir: de copa.
Quiero decir: ¿qué mierda quiero decir?
¿Realmente tenemos que morir?
¿Realmente tenemos que estar allí en punto?
¿No vale que perdimos un tren, o dos?
¿No vale que no hay trenes que nos lleven
porque somos pasajeros que no vuelven?
Quiero decir: nunca.
Quiero decir: realmente.
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